El siku, también llamado zampoña, es la “flauta de pan” típica de los Andes, y tiene su origen en algún lugar de los Andes Centrales (Perú, Bolivia) hace más de 7.000 años. Es el instrumento musical más importante de las sociedades prehispánicas y se han encontrado gran cantidad de ellos desde Panamá hasta el norte de Chile. Está construido con cañas de distintos tamaños que al ser soplados dan sonidos distintos. Tiene una manera de ser tocado muy especial, de a pares. Cada instrumento tiene algunas notas y para tocar una melodía dos o más personas deben ponerse de acuerdo y tocar alternadamente las notas que correspondan. Los sikus se tocan en orquestas llamadas sikuriadas, formadas por entre 10 y 250 músicos. Es común que en las fiestas rituales aymaras del norte de Chile y de Bolivia se encuentren varias de estas bandas y toquen simultáneamente, en una especie de competencia sonora, para ver quien toca mejor y más fuerte.